EN EL SOTANO POR 24 AÑOS

Los locos abundan en todos lados. Argentina, Venezuela, Estados Unidos. También en Austria. Como el caso del malnacido que encerró a su propia hija durante 24 años, abusandola sin piedad durante todo ese tiempo. Si, este mismo de la foto.

Tuvo con ella 7 hijos que también fueron confinados al sótano de su gris departamento. Los niños no habían conocido la luz del día, vivían encerrados sin conocer el exterior.

Durante 24 años aquella mujer fue muerta en vida. No creo que haya un peor destino que ese infierno. Pero claro, los bondadosos y misericordiosos de la religión dirán que no hay que ajusticiarlo al tipo como un cerdo, matándolo a palos y a latigazos, no. Que hay que darle una nueva oportunidad. Al carajo con eso.

Es escoria. Y como tal, hay que exterminarla de raíz. ¿O sólo los bondadosos se jactarán de hacer justicia cuando una hija les sea violada, ultrajada una propiedad o ellos mismos sean víctimas de la maldad?

Y digo "bondadosos" a toda esa gente estupida que se ofende de las palabras que transmito, que se alteran porque escribo "exterminio" en esta nota. Esas personas que creen que tipos como el de la foto merecen una segunda chance.

Atiendan: un fruto podrido es podrido, no merece esperar que madure o se ponga bien, porque está podrido. De modo que lo mismo ocurre con este personaje, es un fruto podrido. ¿ Y qué se hacen con los frutos podridos? Se los extirpa de los arboles para que no arruinen el fruto. Lo mismo la cizaña, se separa de las cosechas.

Asi habría que hacer con aquel malnacido. Pero la hipocrita piedad humana no está para eso. Prefiere hacer justicia con los justos, que con los injustos.

Lo peor es la indiferencia de aquellos que miran para otro lado, sin saber lo que pasa a sus costados. Este caso no es unico. Hay cientos en el mundo. A tu hija le puede pasar si te quitas de la cabeza la estupida idea de que nunca te ocurrirá a ti.

Sólo imagina estar durante 24 años encerrado en el mismo lugar. Sin amigos, sin ver el cielo, siempre haciendo lo mismo. Siendo abusada y humillada todos los días. Sintiendo que no vales nada, y que vives por el mero hecho de vivir. Con la infancia arrancada de cuajo. ¿Acaso aquí no está presente el mal? Hay algo, ahora lo sé, que está detrás de todo esto. Más tarde o más temprano será desenmascarado.