VIOLAN A MUJER EN CITY BELL

Allí vivía una joven pareja, que estaban durmiendo. Abrieron los ojos y se toparon con que los encañonaban. No se resistieron. Les dieron todo lo que tenían: unos 20 pesos, joyas y reproductor de DVD, pero no fue suficiente. Y, molestos, los ladrones se llevaron a la dueña de la vivienda de 25 años a otra habitación y la violaron sin piedad.

No son personas que pasan hambre, tampoco son gente marginada, son simplemente demonios que salen en la noche a procurar maldad en la población. Se podrá hablar de drogas y de la necesidad que esta provoca, pero violar, matar, por mucha droga que se hable, no reemplaza la adicción química. Pero sí da otro placer, otra morbosidad, otra forma de destrucción, está vez hacia el prójimo.
Comentarios